Los helados, las golosinas, la comida rápida, bebidas azucaradas,... son algunos de los productos que más consumen los niños durante el verano. Pero, ¿dónde han quedado las 5 raciones de frutas y hortalizas? Ahora, con la vuelta al colegio, tanto padres como hijos debemos retomar los buenos hábitos que hemos abandonado en las vacaciones. ¿Cómo? Procurando volver poco a poco a una alimentación saludable y una vida más activa, para retomar las rutinas y facilitar que nuestros hijos vuelvan al colegio con las "pilas cargadas" sin comprometer su salud actual y futura. Por ello, desde la Asociación "5 al día" recomendamos a los padres, que no olviden que una alimentación equilibrada, que incluya al menos 5 raciones entre frutas y hortalizas al día, puede ayudar a toda la familia a mantener un buen estado de salud.
Los niños necesitan la energía y los nutrientes, para desarrollar las actividades físicas y psicológicas propias de su edad y que la escuela potencia a través del aprendizaje y las actividades escolares y extraescolares. En la pre adolescencia o cuando la actividad física se incrementa por la práctica deportiva regular o por juegos activos con los amigos, las necesidades de energía aumentan. Y, ¿cómo conseguir que esta energía sea la suficiente? Obteniendo más a través de alimentos como el pan, la pasta, el arroz, preferentemente integrales, y las legumbres o las patatas; también debemos asegurar el aporte de proteínas a través de carnes magras, pescados, huevos o lácteos bajos en grasa. Cuanta más energía se gaste, más nutrientes de otros tipos como vitaminas y minerales, necesitaremos, de ahí la importantica de incluir alimentos variados en nuestra alimentación diaria, especialmente las frutas y hortalizas.
Así que, antes de salir de casa, un desayuno completo con unos trocitos de fruta o un vasito de zumo, leche y pan o cereales . En la mochila, además de los libros y el estuche, no olvidemos meter para el recreo una buena dosis de alimentación sana y equilibrada, un tapper de fruta, que les de vitalidad hasta que vuelvan a casa. Es importante asegurarnos de que en el comedor se encarguen de servirles al menos una ración de hortalizas y una fruta.
Para la merienda , una fruta fresca y unas almendras o un bocadillo, sería perfecto para ayudarles a afrontar el resto de la tarde hasta la hora de la cena, especialmente si tenemos en casa a un pequeño deportista.
Y para la última comida del día, la cena, asegurar una ración de hortalizas crudas o cocinada, para acompañar a otros alimentos que complementen la comida del menú escolar, y si ellos nos ayudan a preparar la cena, ¡mucho mejor!
Con estos consejos, que os ofrecemos desde "5 al día" ya veréis como la vuelta al cole es más saludable y les llena de energía.
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